sábado, 11 de octubre de 2008

Loperita vete ya



¡Ya estamos hartos!

La maquinaria para llegar al "gran califato" está en marcha

La ingenuidad idiota como arma letal
Dori Lustron

"La guerra contra Israel no es una guerra contra Israel. Es una guerra contra Occidente. Es la jihad. Israel esta simplemente recibiendo los golpes que se suponen para todos nosotros. . Si no hubiera habido Israel, el imperialismo islámico habría encontrado otros lugares para liberar su energía y su deseo de conquista. Gracias a los padres israelíes que envían a sus hijos al ejército y permanecen despiertos en la noche, los padres de familia en Europa y América pueden dormir bien y soñar, desconocen los peligros que se ciernen".
"Muchos en Europa argumentan en favor de abandonar Israel a fin de atender las quejas de nuestras minorías musulmanas. Pero si Israel fuera capaz, Dios no lo quiera, de caerse, eso no aportaría ningún consuelo a Occidente. Tampoco significaría que nuestras minorías musulmanas, de repente, cambiarían su comportamiento y aceptarían nuestros valores. Por el contrario, el final de Israel daría un enorme impulso a las fuerzas del Islam. Ellos, y con razón, ven la desaparición de Israel como prueba que Occidente es débil y condenado. El fin de Israel no significa el fin de nuestros problemas con el Islam, sólo seria el comienzo. Esto significaría el inicio de la batalla final de la dominación del mundo. Si Israel puede conseguirlo, se puede conseguir todo. Por lo tanto, no es que Occidente tiene un interés en Israel. Este es Israel. "

Palabras de Geert Wilders. Creador de Fitna, en su Discurso en Cuatro Estaciones, New York, el 25 de septiembre del 2008


Los políticos de hoy en día, en Israel y en el mundo, "adolecen" como los jóvenes y su ingenuidad pasa a ser un peligro letal para el mundo occidental. Conocer la mentalidad del enemigo es un deber y no se pueden dar el lujo de ser cándidos y crédulos frente al fanatismo del Islam integrista.

La tan mentada política de pacificación solo lleva a Occidente a una perdida de tiempo inútil. El tiempo en esta guerra es fundamental porque justamente ellos necesitan "tiempo" para armarse, rearmarse y proseguir la carrera hacia su meta: "gobernar al mundo". El fundamentalismo islámico no busca la paz. El Islam fanatico quiere adueñarse de todos y cada uno de nosotros, de nuestras voluntades, nuestra libertad y hasta de nuestros pensamientos. Y no es con la pacificación que le ofrece Occidente que lograremos derrotarlos. La maquinaria para llegar al "gran califato" esta en marcha. Los grandes intereses de las potencias que venden armas pueden llevar a la destrucción del mundo aunque surjan mentes esclarecidas denunciando el problema.

Israel es el gran escudo de Occidente. Quienes atacan a Israel atacan su propia seguridad. Son los judeofobos, la izquierda progre, acorde a sus intereses, los intelectuales, seculares y teocráticos, juntos. Ellos se unen en un punto común: atacar a Israel y a los judíos. No se dan cuenta que nosotros ya tenemos capacidad defensiva contra el terror como no lo tiene nadie. Defender a Israel es defender a Occidente y en eso estamos.

Los palestinos no quieren la paz. Nunca la quisieron. Salvo que les entreguemos envuelto en papel de seda y cintas el Estado de Israel. Me pregunto que hicieron ellos para merecerse un país como el que tenemos. Cuanto investigaron, desarrollaron, pensaron y cuanto ofrecieron al mundo en estos últimos 60 años.

Arafat nunca quiso la paz y lo demostró pegando el portazo en Oslo cuando le ofrecieron casi todo lo que pedía. Es mas, Oslo fue uno de los tantos fracasos de nuestros políticos israelíes. Y a la vista está, por más que la izquierda israelí siga pensando en peces de colores.

Israel quiere negociar lo innegociable en un momento en que no hay con quien negociar. Y dudo que por mucho tiempo lo haya. Hablamos de paz. Pero…no seamos ingenuos… ¿Con quienes? Si alguno de ellos quiere la paz las presiones de los grupos islámicos no se lo permiten. No quieren paz porque se les cortaría el gran negocio que hacen lucrando con el terror. No recibirían la "ayuda" internacional que permanentemente llena sus bolsillos. Porque…hablemos claro: ese dinero no va para el pueblo…ese dinero es para sus cuentas bancarias engrosadas por la estupidez de Occidente y aun los mismos países árabes que los financian.

Mientras tanto...los palestinos siguen muriéndose de hambre y hacinados en campamentos miserables. ¿Y quien tiene la culpa de ello? Israel. Si Israel no existiera igual se matarían entre ellos como lo están haciendo. Hamas contra Fatah, sunies contra chiies, Al Qaeda (suni) contra Hisballah (chii). Ahora la orden es no ir a Siria porque es peligroso (cuando todo el armamento de Hisballah paso por Siria cuya ambición de adueñarse del Líbano sigue firme)

No aceptan la paz de Olmert. Ni aceptaran la de Livni ni la de nadie. Nunca van a aceptar nada. No les interesa la paz. No les conviene tampoco, salvo treguas de no más de diez años para rearmarse. Esa es la "hudna". Israel tiene que ser destruido y así como "esa" era la idea de Arafat hoy es la misma idea de Hamas, de Abu Mazen, de Hisbollah y de toda la gente que los apoya. Los moderados palestinos ni son moderados ni quieren la paz. Creer en eso es una ingenuidad que no nos podemos permitir porque es un arma tan letal para nuestra seguridad como lo puede ser la bomba nuclear que Irán quiere tirarnos para destruirnos.

Olmert lo usaba de cortina de humo e igual lo hace Abu Mazen ante la presión tanto de los grupos armados como de la comunidad internacional. No creo en utopías. Esta generación de palestinos no esta siquiera preparada para la paz. Acaso: ¿Podrían formar un gobierno que resuelva sus problemas? Solo les enseñan la cultura de la muerte y los estudiantes palestinos que estudian en Israel, que son muchos, no quieren asumir la responsabilidad de participar con los grupos armados atrás. Si ellos educaran a su gente para la paz pueda ser que en una o dos generaciones eso pueda suceder. Mientras tanto hablar de paz con cualquiera de ellos es tan inútil como pretender que un político diga la verdad.

Desde Israel Dori Lustron

Fuente original: www.gentiuno.com

Reenvia www.porisrael.org

viernes, 10 de octubre de 2008

Como siempre, cualquier excusa es buena para el antisemitismo.

Culpan a judíos por crisis financiera de los Estados Unidos

Un informe de la organización Anti Defamation League (ADL) advierte que varios sitios de Internet comienzan a culpar a los judíos por la crisis financiera que vive los Estados Unidos tras la caída del banco de inversiones Lehman Brothers.
Según la organización que advierte sobre nuevas amenazas antisemitas, hay un incremento de ataques en Internet contra los judíos tras la crisis.

“Cientos de posteos antisemitas respecto al Lehman Brothers y a otras instituciones afectadas por la crisis de los prestamos hipotecarios han sido creados a foros de discusión de finanzas”, dice ADL.
“Los mensajes acusan a los judíos en general, y algunos acusan a los judíos de controlar el gobierno y las finanzas como parte del nuevo orden judío y los acusan de la crisis económica”, continúa diciendo el informe.
El líder de ADL, Abraham Foxman declaró que “sabemos de la historia moderna que cuando hay una baja en la economía global, habrá un aumento en el nivel del antisemitismo…y esto es lo que vemos ahora”.
Ya me parecía raro que no hubieran aparecido los nazis de turno (de uno y otro color) para culpar a los judíos de la crisis. A veces pienso que si no existiera el pueblo judío estas alimañas estarían desamparados, tendrían que inventarlo para poder atacarlo. Son unos inútiles cabrones, no dan para más.

jueves, 9 de octubre de 2008

Para los que están dispuestos a olvidar y perdonar ...

La matanza del Maxim en Haifa

El 4 de octubre del 2003, Hanadi Jaradat, una rica abogada y terrorista palestina de la Yihad Islámica, ingresó en el restaurante Maxim de la ciudad de Haifa y, al grito de "Alá Akbar", detonó una bomba suicida que llevaba en su cinturón, asesinando a sangre fría a 29 comensales y dejando heridos a más de 50, algunos de ellos lisiados de por vida. Entre las víctimas mortales se encontraban judíos y árabes por igual, dos familias enteras que dejaron de existir y cuatro niños (incluyendo una beba de dos meses). El blanco del ataque, el restaurante Maxim, era un símbolo de coexistencia donde árabes y judíos de Haifa o sus alrededores ingresaban sin distinción alguna conviviendo en paz, hasta que esta matanza impiadosa (que no discrimina entre chicos, ancianos, mujeres, embarazadas, judíos, árabes o civiles) demostró cuales son las verdaderas intenciones del vecino que tiene Israel. Los medios europeos en su momento se conmiseraron de la terrorista y no de sus decenas de víctimas, y más que de la masacre informaron sobre «la ocupación» y «el ciclo de violencia». A los pocos meses, el Museo de las Antigüedades Nacionales de Estocolmo expuso una muestra de "arte" en la que se exaltaba a la Jaradat bajo el título de Blancanieves (título que por cierto le otorgaron los palestinos). Es mi deber recordar este terrible atentado en su quinto aniversario junto con sus víctimas principales, en el marco de una serie de ataques similares perpetrados por los palestinos que tuvieron lugar en la ola terrorista denominada Segunda Intifada. Aquí están los nombres y edades de las 29 personas inocentes asesinadas que la prensa europea se negó a publicar, civiles desarmados cuyo único crimen era estar disfrutando de una comida familiar:

Cinco miembros de la familia Almog de Haifa:

Abuelo Ze'ev Almog, 71,
su anciana esposa Ruth, 70,
su hijo Moshe, 43,
sus nietos Tomer Almog, 9,
y Staier, 11
Cinco miembros de la familia Zer-Aviv del kibutz Yagur:

Bruria, 59,
su hijo Bezalel, 30,
y su esposa Keren, 29,
junto con su pequeño hijo Liran, 4,
y su beba Noya, 2 meses
Otros:

Zvi Bahat, 35, de Haifa
Mark Biano, 29, de Haifa,
y su esposa Naomi, 25
Hana Francis, 39, de la aldea árabe de Fassouta
Mutanus Karkabi, 31, de Haifa, el guardia de seguridad
Sharbal Matar, 23, de Fassouta
Osama Najar, 28, de Haifa, el cocinero
Nir Regev, 25, de Nahariya
Irena Sofrin, 38, de Kiryat Bialik
Lydia Zilberstein, 56, de Haifa, murió a causa de sus heridas el 9 de octubre
George Matar, 59, de Haifa, murió a causa de sus heridas el 15 de octubre

Que la sangre derramada de las víctimas del terrorismo genocida sea recordada y vengada. Amén ve amén.
Más información sobre la masacre: http://www.mfa.gov.il/MFA/MFAArchive/2000_2009/2004/1/Suicide+bombing+of+Maxim+restaurant+in+Haifa+-+4-O.htm


Ze'ev Almog

Ruth Almog

Moshe Almog

Tomer Almog

Assaf Staier
Bruria Zer-Aviv

Bezalel Zer-Aviv

Keren Zer-Aviv

Liran Zer-Aviv

Noya Zer-Aviv
Hana Francis

Mutanus Karkabi

Sharbal Matar

Osama Najar

Zvi Bahat

Mark Biano

Naomi Biano

Nir Regev

Irena Sofrin

Lydia Zilberstein

George Matar

Muchos son los que esconden la cabeza y no quieren recordar masacres como esta. Creen que así contentarán a los asesinos y dejarán de matar. Se equivocan. Sólo están dándoles alas, engrasándoles las armas.

miércoles, 8 de octubre de 2008

Con la salida de la primera estrella ...

Según el sabio Maimónides, el sonido del shofar ayuda a despertar la conciencia del hombre, invitando a meditar y seguir el sendero del Bien.


Iom Kippur




Iom Kipur es el día más sagrado de la religión judía. La época de los días de penitencia, que comenzaron en Rosh Hashana y continúan en los diez días de penitencia, llegan a su día culmine en Iom Kipur. Es un día de perdón y expiación de los pecados entre el ser humano y D's y entre el ser humano y el prójimo. En Rosh Hashana los seres humanos son juzgados por sus actos, pero el veredicto del juicio es fijado en Iom Kipur.



http://www.masuah.org/iom_kipur.htm

Hoy, con la salida de la primera estrella, y hasta mañana en la noche, la colectividad judía conmemorará el Iom Kippur ("Día del Perdón"), una de las fechas sagradas del calendario religioso.Diez días después de la celebración de Rosh Hashaná (el Año Nuevo) llega la conmemoración de Iom Kippur, una jornada solemne y de recogimiento en la que la persona reflexiona sobre las faltas cometidas durante el año y pide perdón por ellas. El Día del Perdón significa en realidad la culminación de los Iamim Noraim (días de congoja), a los que hay que agregar el mes previo de preparación. Sus orígenes se centran en textos bíblicos de aproximadamente tres milenios de antigüedad y, entienden los expertos, puede residir en la formulación de las grandes preguntas de la existencia humana en el Universo que se hacían los primeros judíos de la Historia.

Prohibido olvidar


Contra el Olvido: Elie Wiesel y la Preservación de la Memoria

Julián Schvindlerman (Revista de la Comunidad Amijai)

"Dime" pregunta el niño que él fue alguna vez al adulto que es hoy, "¿qué has hecho con mi futuro? ¿Qué has hecho con tu vida?". Y el adulto le responde que lo ha intentado. Que ha tratado de mantener viva a la memoria. Que ha procurado dar batalla contra aquellos que quieren olvidar. "Por que si olvidamos" -dice Elie Wiesel ante el Comité Nobel en Oslo en 1986- "somos culpables, somos cómplices".

En el primer volumen de sus memorias, Todos los ríos van al Mar (1995), Elie Wiesel narra la siguiente anécdota. Un día de 1936 en su pueblo natal de Sighet, Transilvania, cuando él tenía ocho años de edad, acompañó a su madre a visitar al rabino de Wizhnitz, una eminencia de la Torah (el Pentateuco) de visita en el lugar. Primero entró él, quedando a solas con la autoridad rabínica. Conversaron sobre sus estudios religiosos, y luego él salió para dejar entrar a su madre. Cuando ésta abandonó la sala, su cara estaba cubierta de lágrimas y no podía parar de llorar. El pequeño Elie le preguntó una y otra vez la causa de su angustia, pero no obtuvo respuesta. Insistió, durante días, infructuosamente. Su madre jamás le confesó el motivo del llanto. Apesadumbrado, se interrogó acerca de que pudo haber hecho mal para avergonzar a su madre ante el rabino. Le tomaría veinticinco años averiguar la verdad, y lo haría en otro rincón del mundo. En Manhattan, donde pasó a residir, un primo suyo presto a someterse a una operación difícil, le pidió al ahora hombre de treinta y tres años que se acercara al hospital a bendecirlo. Sorprendido, puesto que no ejercía oficio religioso alguno, lo hizo de todos modos. A los pocos días, el primo ya recuperado le develó el enigma del encuentro misterioso de Sighet. Su madre le había contado. El rabino de Wizhnitz había dicho: "Sara, debes saber que tu hijo será un gadol b´Israel, un gran hombre en Israel, pero ni tu ni yo viviremos para ver ello". Exactamente cincuenta años después aquél niño de Sighet sería galardonado con el Premio Nobel de la Paz.

Elie Wiesel no olvida, y nos cuenta en el segundo volumen de sus memorias Y el mar nunca se llena (1999), que al momento de recibir la más alta distinción que confiere la humanidad no pudo evitar pensar en su madre, su padre y su hermana menor, todos asesinados durante el Holocausto. "No oigo el aplauso; no oigo nada, y luego todo lo que oigo son las lágrimas invisibles fluyendo en mi alma, oigo las plegarias que mis padres muertos recitan en las alturas, oigo el llamado de mi pequeña hermana Tsipouka cuyo sufrimiento debió haber extinguido al sol por toda la eternidad". Wiesel tenía quince años cuando fue deportado junto a toda su familia a los campos de exterminio nazi. Sólo él y sus dos hermanas mayores sobrevivirían a lo que él denominó "el reino de la noche". Luego de la guerra fue llevado a un orfanato en Francia, adoptó el francés como su nuevo idioma pues no podía seguir hablando en la lengua de los asesinos, estudió filosofía en la Sorbonne, enseñó hebreo, trabajó en coros y luego se orientó al periodismo. Su primer trabajo lo obtuvo con Zion in Kamf, publicación en yidish del Irgún, un movimiento de resistencia judío en Palestina, y luego con Yediot Aharonot, hoy uno de los más grandes diarios de Israel, pero entonces apenas un periódico menor.

Durante diez años rehusó abordar su historia pasada. "Tan pesada era mi angustia", ha escrito en un ensayo incorporado al libro Un Judío Hoy (1978), "que hice una promesa: no hablar, no tocar lo esencial durante por lo menos diez años. Tiempo suficiente para ver con claridad. Tiempo suficiente para volver a adueñarme de mi memoria. Tiempo suficiente para unir el lenguaje del hombre con el silencio de los muertos". Fue un escritor católico, en el marco de una entrevista inconexa, quién motivó al joven sobreviviente a escribir. Un año más tarde, Elie Wiesel envió el manuscrito -"escrito bajo el sello de la memoria y el silencio" según ha dicho- a quién se convertiría en su amigo y mentor, Francois Mauriac. De esas páginas surgiría el libro La Noche, el ensayo más aclamado de toda una obra singular y rica de más de cuarenta libros de ficción y no ficción que Wiesel escribiría a lo largo de su vida. Desde su publicación en 1960 ha sido traducido a más de treinta idiomas y ha vendido más de diez millones de ejemplares; tres de ellos solamente desde el año 2006 cuando la célebre Oprah Winfrey eligió al libro y acompañó a Wiesel a Auschwitz.

El éxito descollante de La Noche ha eclipsado los orígenes humildes de este ensayo poderoso así como de los muchos senderos que debió transitar antes de poder ver la luz del día. Inicialmente tenía 900 páginas, fue escrito en yidish y llevó por título "…Y el mundo callaba". Fue por primera vez publicado en Buenos Aires en 1956, en versión de 253 páginas y 1500 ejemplares, por la Unión Central Israelita Polaca de la Argentina, bajo la guía de Mark Turkow. Posteriormente, tal como ha reseñado Rachel Donadio en el New York Times, fue traducido al francés, en versión aún más reducida de 127 páginas, como "La Nuit" y fue prologado por Mauriac; el más prominente escritor francés de la época y premio Nobel de Literatura de 1952. Aún así, fue rechazado por la mayoría de las casas editoriales de París hasta que lo tomó, en 1958, Les Éditions de Minuit. Vendió poquísimos ejemplares. La traducción al inglés enfrentó similares problemas. Su agente literario, amigo y sobreviviente del Holocausto, Georges Borchardt, lo envió a quince editoriales de Nueva York sin éxito, entre 1958 y 1959. Finalmente fue publicado por Hill & Wang y recibió críticas positivas. Un acontecimiento en otra parte del globo le ayudaría indirectamente a su difusión. En 1960 agentes israelíes secuestraron a Adolf Eichmann en la Argentina y lo trasladaron a Jerusalén. El juicio de 1961 al jerarca nazi convocó atención internacional e instalo el tema de la Shoa en el interés de la opinión pública. Para los años setenta, el Holocausto era enseñado en universidades estadounidenses, y para los años noventa La Noche ya era un texto educativo escolar y universitario fundamental.

La Noche surgió en tiempos en los que pocos estaban dispuestos a escuchar a los sobrevivientes y sus penurias. Eran épocas de negación; no del negacionismo perverso contemporáneo que desmiente la existencia de la Shoa, sino de una actitud negadora de la realidad debido a la dimensión inabarcable de la misma. Pero tiempos de negación al fin. El "Diario de Ana Frank" había sido publicado en 1952 con gran repercusión, pero se trataba de un libro sentimental, incluso optimista, que no llegaba a mostrar los horrores de los crematorios y las cámaras de gas. Wiesel llevaba a los lectores a ese infierno de muerte y destrucción al que la joven Ana Frank -al momento de escribir su conmovedor diario- aún no había arribado. Ella no pudo llegar a documentar su propia muerte trágica en Bergen-Belsen. Elie Wiesel ha dicho que "donde el libro de Ana Frank termina, el mío comienza". En el prólogo del libro, Mauriac expresa su deseo de que La Noche sea leído por tantos lectores como el de Ana Frank. Muchos años después, Wiesel diría que si lo sobrevivientes tuvieron el valor de escribir, al resto de nosotros nos cabe la obligación de leer. Era un libro destinado a perturbar. Así se expresa Elie Wiesel en sus páginas: "Jamás olvidaré esa noche, esa primera noche en el campo de concentración que hizo de mi vida una sola larga noche bajo siete vueltas de llave. Jamás olvidaré ese silencio nocturno que me quitó para siempre las ganas de vivir. Jamás olvidaré esos instantes que asesinaron a mi Dios y a mi alma, y a mis sueños, que adquirieron el rostro del desierto. Jamás lo olvidaré, aunque me condenaran a vivir tanto como Dios. Jamás".

A Elie Wiesel se le atribuye haber creado -aún sin proponérselo- el género de la literatura del Holocausto. A lo largo de los años ha recibido varios premios a su compromiso y a su trayectoria. Pero quizás, el reconocimiento más adecuado a su vida y obra haya sido el haber trascendido -como ya ha sido acertadamente acotado- como el hombre que no le permitió al mundo olvidar el Holocausto. El adulto puede responderle al niño, que lo logró.

Fuente: AMIJAI
Reenvio de http://www.porisrael.org/
Prohibido olvidar, prohibido perdonar. El perdón es inmoral.

martes, 7 de octubre de 2008

La guerra que estamos perdiendo

La Guerra del Islam radical contra Occidente
Ruben Kaplan


El día 5 de septiembre pasado,70 diarios de Estados Unidos, entre los que se encontraba el prestigioso The New York Times, adjuntaron en sus ediciones, un controvertido y valiente DVD denominado "Obsession" Radical Islam's War Against The West.

Por iniciativa y soporte de la Fundación Clarion, que se declara una organización independiente y que no acepta fondos del Gobierno de los Estados Unidos, instituciones políticas ni organizaciones extranjeras, 28 millones de copias fueron distribuidas en el territorio estadounidense.

El film documental estrenado en el 2005, que fue dirigido por el sudafricano Wayne Kopping y concebido por Peter Mier con la producción del israelí-canadiense Raphael Shore y Brett Halperin, explicita crudamente la amenaza del radicalismo islámico hacia la civilización occidental. La particularidad de la película, es que la totalidad de su contenido fue extraído de la mismísima media árabe. Se pueden observar fragmentos de la televisión musulmana, con invocaciones a la Jihad global declarando sin rubor, el objetivo de la dominación del mundo por el Islam, sermones en mezquitas y arengas a multitudes desde los minaretes, vociferando muerte a América e Israel y la enseñanza e incitación al odio en las madrazas, escuelas religiosas coránicas, de donde egresan miles de terroristas, ávidos por la tanatomanía en nombre de Alá.

"Obsession" también traza un paralelismo entre el nazismo y los movimientos fundamentalistas islámicos, parangonando sus respectivas propagandas y libelos antijudíos.

Probablemente el miedo cerval hacia los terroristas radicales islámicos, fue la razón por la que durante un largo período desde su realización, el documental ganador del Best Feature Film 2005 Liberty Film Festival, que obtuviera laudatorias críticas y otros galardones posteriores, no sea conocido en muchos países y no haya tenido la repercusión masiva que obtuvo ahora.

Uno de los pocos diarios americanos que se negó a distribuir el DVD, el St. Louis Post, alegó que durante 2 años, el film perturbó a los musulmanes. El eufemismo de temor, cuidado por no herir la susceptibilidad de los islamitas, es ampliamente utilizado, y se complementa con otra excusa, la de no ofender a los musulmanes.
Desde luego, no se puede involucrar ni asociar a toda la feligresía islámica con el terror.

No existe unanimidad en cuanto a la cifra exacta de musulmanes que hay en la actualidad. Las estimaciones varían entre la moderada de ochocientos millones y la excesiva que los sitúa cerca de los mil quinientos. Posiblemente, el número real deba estimarse en torno a mil millones. Un para nada exiguo porcentaje de entre el veinte y el treinta por ciento, adheriría a las posiciones radicalizadas.

Un grupo Americano de apoyo a los musulmanes, solicitó a la Federal Election Comission que investigue si la Fundación Clarion que distribuyó el alarmante DVD sobre el Islam , no es embozadamente, una fachada de un grupo israelí que tiene como objetivo ayudar a promover la candidatura del candidato John McCain.

Centenares de blogs y publicaciones islámicas, como Noticias coránicas de Irán, se sumaron a las protestas por la difusión de "Obsession" e intentaron descalificar a los productores, atribuyéndoles, ser agentes sionistas que junto al grupo religioso judío Aish Hatoráh se unieron para desacreditar al Islam.

En ningún caso, esbozaron una desmentida del irrefutable material del film, basado en su totalidad, en la prensa árabe.

Los promotores de "Obsession": Radical Islam's War Against the West, negaron tratar de promocionar ninguna campaña presidencial y agregaron que era incorrecto vincular la campaña del DVD con el grupo educacional de Jerusalén, Aish Hatoráh Internacional, si bien alguno de sus ex y actuales empleados, participaron del proyecto.

Sin amilanarse por las denuncias en su contra, la Fundación Clarion, promete redoblar su apuesta, denunciando el alzamiento de la espada de Damocles por parte del Islam radicalizado sobre la cabeza de occidente, con el inminente estreno de otra película que ayudó a producir: The Third Jihad, (La tercer Jihad) otro estremecedor documental, que pretende concientizar al mundo, que supone equivocado, que sólo Israel es el amenazado.

Fuente y distribucion: www.porisrael.org
Enlace: http://desdeisrael.com

Es imposible ganar una guerra cuando no se es consciente de estar inmerso en ella, cuando te niegas a ver al enemigo como tal por mucho que te de muestras de buscar tu destrucción. Estamos perdiendo esta guerra y nos va la supervivencia en ello.

lunes, 6 de octubre de 2008

Hace 35 años

Gracias, Andrés, por recordármelo:

El día de hoy se cumplieron 35 años del estallido de la Guerra del Yom Kipur. El viernes 6 de octubre de 1973, día de recuerdo solemne del Yom Kipur (Día del Perdón), el día más santo del calendario judío, Egipto y Siria comenzaron un ataque coordinado por sorpresa contra Israel. El equivalente de las fuerzas totales de la OTAN en Europa se movilizó sobre las fronteras del Estado hebreo. En las Alturas del Golán, aproximadamente 180 tanques israelíes se enfrentaron a la embestida de 1.400 tanques sirios. A lo largo del canal de Suez, menos de 500 defensores israelíes fueron atacados por 80.000 egipcios. Israel, cegado por la euforia de la victoria en la guerra de 1967, fue asaltado por sorpresa y se vio totalmente desprevenido, en parte gracias al fracaso de los cuadros superiores del servicio de inteligencia militar (AMAN) que desecharon con suma imprudencia todos los indicios e informaciones obvias de diversas fuentes que indicaban claramente que los Estados árabes se preparaban para iniciar una guerra nuevamente desde hacía meses, negándose a advertir al gobierno y al pueblo sobre la inminencia de una contienda bélica cuando era el momento adecuado para prevenir lo que vendría. La guerra había atrapado al Estado judío con la guardia baja.

Los estados árabes eran rápidamente reabastecidos por mar y aire desde la Unión Soviética -antes, durante y después de la guerra- que rechazó todos los esfuerzos de Estados Unidos para un inmediato cese al fuego. Como resultado, el gobierno norteamericano comenzó con retraso su propio puente aéreo a Israel (cuyos aviones de carga tuvieron serias dificultades para contar con una zona de reabastecimiento en Europa para trasladar los suministros a los israelíes, producto del rechazo de los gobiernos europeos a prestar sus bases transitoriamente, aunque posteriormente los aviones norteamericanos pudieron establecer su base de reabastecimiento en las islas de Gibraltar).

Al principio de la contienda, Israel no solo debió enfrentarse con los ejércitos sirio y egipcio bien equipados producto de décadas de rearme soviético, puesto que, aparte del apoyo colosal en materiales bélicos e instrucción directa que la Unión Soviética prestaba a los árabes durante años enteros, los agresores contaron también con el apoyo de Irak (que transfirió un escuadrón de aviones caza a Egipto y una división de unos 18.000 hombres y varios cientos de tanques en las Alturas del Golán), Arabia Saudí y Kuwait (entre los dos 3.000 soldados), Libia (aviones de combate y una subvención de 1.000 millones de dólares), aparte de Argelia, Túnez, Marruecos y Jordania (que también aportaron soldados y equipo bélico). El Líbano también permitió que terroristas palestinos bombardearan asentamientos civiles israelíes desde su territorio. Los palestinos lucharon en el frente sur junto con los egipcios y los kuwaitíes. Las monarquías corruptas del petrodólar de Arabia Saudí y Kuwait fueron el sostén económico de esta coalición y utilizaron su oro negro como arma política para amenazar con un embargo de petróleo a toda nación occidental que se atreviera a ayudar al Estado judío. Nuevamente Israel se encontraba sola.

No obstante, a pesar de todas las desventajas, Israel pudo salir adelante. Sus hombres y mujeres, obreros, artesanos, estudiantes, profesores, campesinos y comerciantes se alistaron en el Tzahal para luchar por sus familias, su existencia y su país. Todos como uno solo, para defender sus hogares y su honor como hombres libres, de una patria libre. Estos soldados, a veces improvisados, luchaban como tigres, ellos sabían el por qué de esta lucha desde hacía mucho tiempo y lo que les esperaba en caso de ser derrotados. Su mejor arma fue el coraje y la plena conciencia de la justicia de su lucha.

Puesto a la defensiva durante los primeros dos días de combate, Israel movilizó sus reservas y finalmente rechazó a los invasores, llevando la guerra muy dentro de Siria y de Egipto, recuperando gradualmente el territorio perdido durante los dos primeros días de batalla e incluso penetrando varios kilómetros en el interior de los países enemigos. Dos semanas después, no quedaba nada de las fuerzas sirias en el norte o los dos principales ejércitos de Nasser cercanos al Sinaí, mientras que las últimas fuerzas del remanente Tercer Ejército egipcio estaban rodeadas y a punto de ser pulverizadas, dejando el paso libre hacia El Cairo. Pero a último momento, se produjo la votación del Consejo de Seguridad de la ONU para un alto al fuego exactamente el mismo día en que las fuerzas israelíes habían completado el cerco, aislado al Tercer Ejército egipcio y se aprestaban a destruirlo. Egipto fue salvado de una desastrosa derrota aún mayor por el Consejo de Seguridad de la ONU, que había dejado de actuar mientras la marea estuvo a favor de los árabes. La Unión Soviética tampoco había mostrado ningún interés en iniciar empeños de pacificación mientras parecía que los árabes podrían ganar, pero casualmente los líderes rusos estallaron con amenazas y alaridos para la interrumpción de las hostilidades cuando se vio claramente quién iba a ser el vencedor absoluto.

Pese al éxito último de las Fuerzas de Defensa Israelíes en el campo de batalla, se tuvo que arrancar la victoria a un precio altísimo para Israel, en vidas, en costo económico y en daños. Un total de 2.688 soldados israelíes fueron muertos. La imagen del fracaso diplomático y las enormes pérdidas para la sociedad israelí, se hizo evidente con la renuncia de la Primer Ministro Golda Meir y la principal dirigencia del gobierno.

Pero a pesar de todo, Israel pudo salir adelante, corregir sus errores, mejorar la calidad de su armamento, cambiar algunas estrategias, aumentar la efectividad de la inteligencia y reconstruir sobre cimientos. Los hombres de las Fuerzas de Defensa de Israel, demostraron una valentía invaluable en todo momento, lugar y situación. No solo eso, sino que el Tzahal también dio una lección de grandeza con los prisioneros árabes que capturó. Numerosos observadores reportaron que el tratamiento de Israel a los soldados capturados fue irreprochable. El representante de Amnistía Internacional declaró: «ellos han sido bien tratados… y parecen estar recibiendo la mejor asistencia médica posible».

Poco después de su liberación, el coronel sirio Atnon El-Kodar se quejó de haber sido maltratado por los médicos israelíes, acusándoles de que innecesariamente le habían amputado una pierna. Un periodista norteamericano, Ed de Fontaine, que había conocido a Kodar en un hospital israelí, pensaba que el coronel debía «tener muy mala memoria respecto a lo que se había hecho para salvarle la vida… Él me dijo que le debía la vida a [su] médico».

En contraste, los soldados israelíes capturados por tropas sirias y egipcias fueron maltratados. Después de rendirse, docenas de soldados israelíes fueron asesinados, otros fueron torturados en violación a la Convención de Ginebra sobre Prisioneros de Guerra. Según un informe presentado ante la Cruz Roja Internacional por el gobierno israelí el 8 de diciembre de 1973, las tropas israelíes descubrieron cadáveres de soldados israelíes en las Alturas de Golán, atados de manos y pies y con los ojos vendados. Habían sido ejecutados a quemarropa.

En el frente egipcio, según un informe presentado ante la Cruz Roja el 9 de diciembre de 1973, a los soldados israelíes no les fue mejor. Los soldados que se rindieron fueron apaleados, sujetos a flagelaciones, agresiones sexuales, quemaduras y hambre (segun los propios testimonios de los prisioneros que luego regresaron), además de que muchos fueron ejecutados luego de su rendición. Después de la guerra, Siria se rehusó durante meses a proporcionar las listas de prisioneros de guerra a Israel, la Cruz Roja o el secretario de Estado de EEUU Henry Kissinger.

El Sunday Times de Londres reportó que los oficiales sirios habían entregado prisioneros de guerra israelíes a los equipos de interrogación militares soviéticos. «Los interrogadores… han empleado técnicas médicas y de otras clases para quebrar la resistencia de los israelíes», decía el Times.

Clara muestra de la diferencia entre unos y otros.

No quería dejar pasar esto. Quería recordar en este nuevo aniversario de la guerra de 1973, a todos aquellos que sacrificaron sus vidas por la supervivencia de Israel y su gente durante aquellos oscuros días de tenaz lucha. Sea bendita su memoria.

Recomiendo ver las siguientes filmaciones...

Breve documental en inglés que resume los principales acontecimientos de la guerra desde un aspecto humano:

http://www.youtube.com/watch?v=asnK2nq5t-k

Interesante documental detallado sobre la cronología de la guerra y sus aspectos militares (en español):

http://video.google.es/videoplay?docid=-8757823140780495887

Aunque entonces era muy joven y las noticias tardaban en llegar, aún recuerdo aquellos días y la alegría por la victoria.

¡AM ISRAEL JAI!