viernes, 20 de junio de 2008

Tregua para crédulos

Porisrael.org Dori Lustron

La tregua no es el comienzo de la paz
Ana Jerozolimski
Ayer jueves, a las 6 de la mañana hora de Israel, entraba en vigencia la tregua pactada entre Israel y Hamas, a través de la mediación egipcia.

Aún suponiendo que todo funcione como fue acordado, que durante seis meses no se abra fuego desde la Franja de Gaza hacia la población civil del sur de Israel-ni de cohetes, ni de morteros, cargas explosivas o disparos- , que no suceda nada que lleve a Israel a reaccionar , la situación es compleja.
En el mejor de los casos se puede hablar de escepticismo, no de alivio ni de festejos de ningún tipo. Mientras los pesimistas (¿serán ellos los realistas?) sostienen que la tregua es una catástrofe que no hará más que dar a Hamas y los otros grupos radicales un respiro que les permita organizarse, fortalecerse y prepararse para una nueva serie de choques, los "optimistas" tampoco salen a las calles con luces de bengala por la "llegada de la paz". En una situación como la actual, los "optimistas" son simplemente aquellos que creen positivo se haya dado una nueva chance a un alto el fuego, confiando en que realmente aguante medio año y no se desmorone en cuestión de días, dando paso a lo que la mayoría del país parece creer tarde o temprano llegará: un operativo militar de gran envergadura para intentar debilitar seriamente a Hamas. Pero nadie cree que con esta tregua, llega al fin la paz.
Está clarísimo que Hamas no aceptó la tregua porque quiera abrir el camino hacia un entendimiento con Israel, sino porque desea aliviar un poco la presión. Las encuestas todas muestran que en Gaza ha bajado su popularidad y que en general ha subido algo la del Presidente Mahmud Abbas, a pesar de que el control del poder en Gaza no se ha debilitado.
Pero presiones no faltan, la situación interna es difícil, y a Hamas le conviene la tregua. Cuando hay silencio, si Israel levanta aunque sea parcialmente las restricciones impuestas a Gaza en el bloqueo debido a los ataques en su contra, se estabiliza la situación y ello ayudará a Hamas. Ni que hablar de los entrenamientos y el contrabando de armas con que la organización continuará fortaleciéndose también durante la tregua.
Uno de los elementos claves del entendimiento sobre la tregua es el cese de la introducción de armas y explosivos a través de la frontera entre Gaza y el vecino Egipto. Pero cabe suponer que Hamas confía en que Egipto actúe igual que hasta ahora: que no haga prácticamente nada para impedirla. Si no hay atentados en Egipto es por la firmeza de sus servicios de seguridad internos. Y si no logran impedir el contrabando a través de los túneles subterráneos entre Sinaí y Gaza, no es, seguramente, porque no puedan...
Hamas afirma que la tregua constituye una victoria de la organización. Lo que nos preocupa no es la retórica interna para dar a la gente la sensación de que ganaron, sino la convicción de los líderes que así hablan, de que si Israel aceptó el alto el fuego, es porque no puede contra ellos.
Es que fue precisamente esa convicción la que abrazó Hamas en agosto del 2005, cuando Israel se retiró de la Franja de Gaza, evacuó los asentamientos y desmanteló las bases militares en dicho territorio. Nos lo dijo personalmente Mahmud al Zahar, en su casa en Gaza, un mes antes de la salida de Israel. "Nosotros los echamos, es por nuestra resistencia que los israelíes se van". Es que el tema no es mera semántica, cuestión de interpretación, sino de visiones políticas y de percepciones que crean realidades.
Eso es lo peligroso. En agosto del 2005, en lugar de tomar la retirada israelí como buena forma de empezar de nuevo, no necesariamente un romance con Israel pero al menos, sí una etapa de reorganización interna de cara a la independencia, Hamas y sus socios optaron por intensificar los ataques contra Israel. Su lógica era que si sacaron a Israel de Gaza por la fuerza, pues mejor seguir, aunque ya no esté allí, seguir atacando también territorio soberano de Israel.
Algo de ese espíritu se vivió también ayer, supuestamente último día antes de la tregua, con una lluvia de cohetes y morteros, decenas, disparados hacia Sderot, Ashkelon y varios kibutzim aledaños. En Sderot hubo un impacto directo en un edificio, concretándose otro de los numerosos milagros regionales, con la casa vacía. En Ashkelon, hubo varias personas en shock.
Parecía como un intento, hasta último momento, de seguir disparando, lo más posible. ¿Para qué? ¿Para preparar el terreno para la tregua? No, para ver si tienen suerte y el último día, se quedan con el símbolo de algún israelí muerto, como señal de que realmente, la tregua es su "victoria".

Una tregua para preparar el siguiente crimen. Una tregua para crédulos. Una tregua para imbéciles. ¿Da tregua el cáncer? ¿o sencillamente hay que eliminarlo para sobrevivir?

Nunca te puedes fíar ....

Porisrael.org Dori Lustron

Rechazando el terrorismo, pero no la jihad
Robert Spencer
http://www.eldiarioexterior.com/noticia.asp?idarticulo=20784
Uno de los principales teóricos de Al-Qaeda dice rechazar el terrorismo, sin embargo la realidad siempre es otra: todo lo que hace es defender un cambio de estrategia.


Gran polvareda está levantando "La rebelión interior: Un cerebro de Al Qaeda cuestiona el terrorismo," de Lawrence Wright, en el número del 2 de junio del New Yorker. En él, uno de los principales teóricos de Al-Qaeda rechaza el terrorismo – conduciendo a que una cascada de voces tanto conservadores como progres celebren que el final de la guerra contra el terror se encuentra al alcance de la mano.

Desafortunadamente, la realidad – como es generalmente el caso -- no es tan reconfortante. Sayyid Imam al-Sharif, Dr. Fadl, el sujeto del artículo de Wright, no rechaza la idea de que los musulmanes tengan que combatir para subyugar a los infieles bajo el dictamen de la ley islámica. Todo lo que hace es defender un cambio de estrategia. Menos terrorismo, más jihad soterrada. Estas noticias no deberían hacer que los americanos vuelvan a dormir; deberían estimularlos a enterarse de las formas en las que la agenda jihadista de supremacía islámica está avanzando sin armas ni bombas.

En un pasaje clave, Montasser al-Zayyat, que Wright identifica como "abogado islamista," molesta al segundo de a bordo de Al-Qaeda Ayman al-Zawahiri al afirmar que "la jihad no debe restringirse a un enfoque armado." Esto es indicativo del optimismo a ultranza que muchos han extraído de la lectura del artículo de Wright: Zayyat no dice que la jihad no deba emprenderse contra los infieles. Todo lo que dice es que no debe restringirse a las armas. Pero muchos lectores parecen asumir que estaba diciendo lo primero.

"Zawahiri," dice Wright, "estaba cada vez más aislado. Entendió que la violencia era el combustible que mantenía en marcha las organizaciones islamistas radicales; no tenían futuro sin terror.

Eso puede ser así en el caso de algunas organizaciones. Otras, como la Hermandad Musulmana, salen adelante igual de bien sin la violencia. De hecho, la Hermandad es la principal fuerza detrás de la agenda de la jihad soterrada, que pretende (en palabras de un operativo de la Hermandad en 1991) "la eliminación y la destrucción de la civilización occidental desde dentro y `sabotear´ su miserable casa mediante sus manos y las manos de los creyentes de modo que sea eliminada y la religión de Alá salga victoriosa sobre el resto de las religiones."

¡Ah, pero no vuelan por los aires nada en la búsqueda de este objetivo! Y puesto que el terrorismo es el único aspecto del problema supremacista islámico que aparece a la vista de la mayoría de los analistas occidentales, la mayoría asume que cualquier grupo islámico no violento, hasta los que trabajan por someter a Occidente desde dentro, es un benigno moderado.

En todo caso, este grupo reformista particular, según Wright, "escribió una serie de libros y de folletos, conocida colectivamente como `las revisiones,´ en los que formalmente explican su nuevo pensamiento." Wright se encontraba con el Gran Muftí de Egipto, el jeque Ali Gomaa, para preguntarle por esto.

Wright describe a Gomaa como "un estimado defensor del Islam moderado." Desafortunadamente, es un estimado defensor del Islam moderado que apoya a Hizbulah. "Gomaa," continúa Wright, "también se ha convertido en defensor de las mujeres musulmanas, de las que dice deben tener igualdad con respecto a los hombres." Desafortunadamente otra vez, él es un defensor de aquellas mujeres musulmanas que han hablado positivamente de la violencia doméstica. "Sus tajantes condenas de las formas extremas del Islam," dice Wright, "le han valido ser objeto de odio entre islamistas e icono entre los progresistas, cuyas voces se han sido dominadas por el trueno de los radicales." Pero sus tajantes condenas de las formas extremas del Islam se han acompañado de desmentidos de las informaciones que apuntaban a que él había rechazado la pena capital islámica tradicional para los apóstatas.

Gomaa dice a Wright: "Aceptamos las revisiones condicionalmente, no como enseñanzas verdaderas del Islam sino como la interpretación de que este proceso es como la medicina de un momento concreto."

En otras palabras, las verdaderas enseñanzas del Islam incluyen el mandato para emprender la jihad contra los infieles. Pero la jihad violenta se puede aparcar temporalmente como "la medicina de un momento concreto." Es decir, momentos diferentes exigen tácticas diferentes, pero el objetivo final sigue siendo el mismo.

Significativamente, Gomaa también dice: "No hemos conocido a la persona que pueda ser devuelta del terrorismo a una vida normal."

Entonces se produce una admisión extraordinariamente importante, teniendo en cuenta las tan exageradas declaraciones del General Douglas Stone entre otros acerca de curar a los jihadistas de su jihadismo.

Tras trazar las diversas razones por las que, en la nueva opinión de Fadl, la jihad global de hoy es ilegítima, Wright nos informa de que "Fadl no condena toda actividad jihadista." De hecho, Fadl dice que "la jihad en Afganistán llevará a la creación de un estado islámico con el triunfo de los Talibanes, si Dios quiere," y que "si no fuera por la jihad en Palestina, los judíos se habrían introducido sibilinamente en los países vecinos hace mucho tiempo." Y en cuanto al 11 de Septiembre, Fadl pregunta, "¿qué bien hay en que destruyas uno de los edificios de tu enemigo, y que destruya uno de tus países? ¿Qué bien hay en que mates a uno de los suyos y él mate mil de los tuyos? … Ésa, en resumen, es mi evaluación del 11 de Septiembre."

En otras palabras, fue tácticamente estúpido. No moralmente equivocado.

Esto no es ningún rechazo de la jihad. Es simplemente un cambio en táctica. Debe hacernos todos más conscientes de, y estar en guardia contra, la jihad encubierta.

lunes, 16 de junio de 2008

Irán impone su "paz" en el Libano

Llega la "paz" al Líbano
George Chaya

Una victoria más de la revolución iraní

El profesor egipcio Anwar el Hawad, del diario Al Silaza, se hacía la semana pasada una pregunta curiosa: ¿Qué pensará ahora el presidente Zapatero de su ocurrente y risueña "alianza de civilizaciones", si es que piensa? La impresión es la misma entre los ministerios árabes. ¿Cómo han podido hacer esto los iraníes?, preguntan en privado los saudíes, ¿Cómo es posible que lo hicieran?, preguntan los egipcios. La maniobra iraní en el Líbano cierra el círculo de la promesa de campaña del Presidente Ahmadineyad de llevar la Revolución Islámica a las puertas de Europa (a orillas del Mediterráneo lo hizo con Gaza en su mandato anterior) y finiquita por completo la justificación de ver al Líbano hoy como estado independiente.

El 17 de enero de este año, el diario kuwaití Al Watán declaraba "la trompeta que anuncia la llegada de la iniciativa árabe al Líbano" el atentado contra un vehículo diplomático norteamericano dos días antes. Tan prolífica como es la Liga Árabe en estos planes de paz -- ya podría serlo en condenas al islamismo -- la crisis libanesa se superaba entonces con tres puntos: elección como presidente del jefe del ejército, Michel Sleiman; formación de un gobierno de unidad nacional en el que ningún partido tiene poder de veto; y adopción de una nueva ley electoral. La campanada la ha dado Irán, y consiste en que sí hay poder de veto, y lo tiene Irán a través de Hezbolá. Si 'sorpresa' es la palabra en las cancillerías europeas hoy, 'asombro' es el ánimo imperante en los países árabes. La maniobra iraní, comparable a situarse a la cabeza de una concentración y reivindicar su dirección, ha permitido a Irán lo que nunca habría logrado a priori: imponer a su candidato con la aprobación de la Liga Árabe sin que la Liga Árabe lo haya aprobado.

Los libaneses llaman ya a su presidente "el faraón del Líbano", y no es para menos. Michel Sleiman no sólo ostenta el poder, sino que tiene más poderes que ningún presidente anterior y la facultad de nombrar a dedo a los ministros del nuevo gobierno. La sorpresa en el Líbano se extiende también a orillas americanas, y no sólo porque Irán limita ya con el Mediterráneo, sino porque "casualmente", el plan de paz de Irán para el Líbano, con cuño de la Liga Árabe, "coincide" con el plan que durante los dos últimos años ha defendido el presidente Assad, y todo escasos días después de que Washington empezase a mirar con buenos ojos a Siria por sus negociaciones de paz soterradas con Israel (que quedan en evidencia ya a estas alturas como simple maniobra de relaciones públicas, en caso de que alguien pensase en serio que Siria iba a desarmar a los palestinos). El presidente sirio ve así reafirmadas sus políticas pre-retirada del Líbano al tiempo que su régimen muestra al mundo que "coopera con una salida a la crisis libanesa", que por ende está capitaneada por el patrón de ambos, sito en Teherán. Queda claro, en suma, que negociar, negocian iraníes y europeos pero los tantos los marca Irán.

A finales de 2007 "surgió" casualmente otra "crisis" en el Líbano en la que también se perfilaba como presidente al General actual en cuestión. ¿Qué impidió entonces lograr lo que se ha logrado hace menos de 7 días? Cuando parecía que se produciría un acuerdo en la elección del General Michel Sleiman para ocupar el sillón presidencial, la oposición, influenciada por Teherán y Damasco, comenzó a presionar y exigir más a través de su aliado cristiano, el General Michel Aoun. La facción pro-iraní quería "un tercio más una" de las futuras carteras del Gabinete para asegurarse en la práctica el veto sobre todas las cuestiones fundamentales. Hoy tiene las carteras y el veto por ley, al margen de ellas. Esto además decapita a la mayoría, al insistir en que sus principales dirigentes, Saad Hariri, Fouad Siniora y Walid Jumblatt, deben quedar excluidos -- oficial u oficiosamente -- de un futuro gobierno. Mientras Europa y Estados Unidos han estado pelando la pava, Irán ha movido todas las fichas que ha querido. Y que tomen nota aquellos Demócratas pro-Obama partidarios de la ONU como garante de la paz: Naciones Unidas no ha estornudado. Por el lado de "los hermanos árabes del Líbano" y "la calle árabe", parece que dar un golpe de estado oficioso no es mayor problema ni ocupación. La Liga Árabe por su parte, consciente de la afrenta iraní, trata de salvar la cara proclamando el desarme de Hezbolá, algo que no se cree nadie. En palabras de un alto funcionario saudí en Al Yazira, "El bebé es ahora una fiera indomable".

Y ahora? Ya no queda nada. Aquellos que no movieron ficha antes no la van a mover después, y aquellos que se han visto libres de llevar a cabo esta expansión urbanística hacia la costa sin precedentes se disponen ahora a aniquilar la identidad libanesa, vaciar y destruir las instituciones democráticas, y convertir al Líbano en un nuevo tentáculo del terrorismo en su guerra de expansión contra la civilización judeocristiana; de Hamastán, antes Gaza, llegamos a Hezbolastán, antes Líbano. Desaparece así esa quimera que es la "democracia libanesa" como si fuera Atlantis, solo que tragada esta vez por las aguas de color verde chiíta de una Revolución jomeinista que ya toca a las puertas de Europa. En los próximos meses se verán proliferar los velos islámicos por el llamado "París del Mediterráneo"

Fuente: diariodeamerica.com
Enviado por porisrael.org/desdeisrael.com
Un pasito más hacia el precipicio. Ante la mirada impasible de Eurabia, ante la pasividad de los USA, ante la inoperancia del gobierno de Olmert, Irán extiende sus tentáculos y lleva su islamismo chiita hasta la frontera de la civilización. Hezbolastán ha nacido. Traerá muerte y desolación bajo el brazo.

domingo, 15 de junio de 2008

Sucede en Dinamarca


La táctica demografica de los musulmanes Jose Brechner ( Porisrael.org Dori Lustron)

La manera más conocida de los musulmanes para amedrentar y subconscientemente lograr cierto dominio sobre las sociedades occidentales, es la del terrorismo. Pero hay una forma más sutil para influenciar sobre los pueblos que los acogen, es la táctica demográfica.
Las mujeres musulmanas a diferencia de las occidentales, no usan anticonceptivos y son alentadas a parir numerosa prole. Es común ver familias con 10 o 12 hijos. Esa situación genera una desproporción numérica en los lugares adonde emigran, y es usada para imponerse sobre la sociedad anfitriona, para convertirse eventualmente en mayoría. La maniobra es practicada en Israel por los palestinos, en Líbano por los Chiitas y Sunitas, y en Europa, por los mahometanos en general, donde ya suman 54 millones.

Hasta 1979 prácticamente no se veían musulmanes en Copenhague. Los daneses recibían cordialmente a los extranjeros, sintiéndose orgullosos de su socialismo liberal que había derrocado a los conservadores en 1929, y resaltaban por sus éxitos socio-económicos.
Dinamarca se esforzó por ser una sociedad abierta donde ofrecían a los recién llegados las mismas ventajas que a sus connacionales. La criminalidad era bajísima, el nivel educativo excepcional, y los acompañaba una admirable historia de humanismo y multiculturalismo.

Para 1990 la población musulmana había crecido y no mostraba ningún interés por integrarse a la sociedad danesa, más bien empezó a condenar su liberal estilo de vida, al que consideran decadente.
En un artículo publicado por Daniel Pipes y Lars Hedegaard en el que pronosticaron que el problema migratorio explotaría en Dinamarca, relataron: "Los inmigrantes musulmanes constituyen el cinco por ciento de la población, pero consumen el 40 por ciento de la ayuda social". "Los musulmanes son apenas cuatro por ciento de la población danesa de 5.4 millones, pero forman la mayoría de los violadores convictos, un asunto inflamable, considerando que prácticamente todas sus víctimas son no-musulmanas. Similares proporciones se manifiestan en otros crímenes".
Un estudio reciente muestra que sólo cinco por ciento de los musulmanes contraen matrimonio con danesas. Las costumbres islámicas obligan a que la hija de ambos se case con algún pariente mahometano de lo contrario está sujeta a la pena de muerte, cosa que lógicamente atemoriza a las escandinavas.
Los islamistas no tienen ningún respeto por las costumbres y normas del lugar, y predican abiertamente que introducirán las leyes coránicas cuando la población alcance mayor número. Al ritmo actual, en 40 años uno de cada tres habitantes será musulmán.
No es entonces de extrañar, que en 2005 hubiera el brote de violencia callejera por la publicación de las caricaturas de Mahoma en la prensa danesa, que fue rematado con el ataque suicida a la embajada de Dinamarca en Pakistán la semana pasada, del que Al Qaeda se adjudicó la autoría.
En 2001, los daneses eligieron a su gobierno más conservador en 70 años dejando atrás sus generosas ideas inmigratorias. Hoy Dinamarca tiene las leyes más estrictas de Europa en ese campo, lo que ha sido tildado de "racismo" por la prensa progre europea.

Hoy, si quieres ser danés, debes tomar tres años de lenguaje; debes pasar un examen sobre historia y cultura de Dinamarca; debes haber vivido siete años en el país para solicitar ciudadanía; debes mostrar intención de trabajar, y debes tener un empleo esperándote. Si quieres traer una esposa, ambos cónyuges deben tener más de 24 años, y no te resultará tan fácil llevar contigo a tus familiares y amigos. No podrás construir una mezquita en Copenhague, aunque tus hijos tendrán alrededor de 30 escuelas de cultura y lengua árabe para elegir.

En 2006, el Ministro de Empleo Claus Hjort Frederiksen, explicó que los musulmanes han abusado del sistema de seguridad social en tal medida, que eventualmente podrían llevar al estado a la bancarrota.
La Ministra de Inmigración Rikke Hvilshoj destaca por su firmeza en aplicar las leyes. Para testear a la ministra, el imán radical Ahmed Abdel Rahman Abu Laban, le exigió una compensación monetaria, "para aplacar la sed de venganza de la familia", por un musulmán que fue asesinado en un suburbio.
Hvilshoj desestimó la demanda, ante lo que el imán arguyó que esa era la costumbre en la cultura islámica. La ministra replicó que lo que se hace en los países musulmanes no es necesariamente lo que se hace en Dinamarca.
La respuesta no se dejó esperar. Prendieron fuego a su casa mientras dormía con su esposo e hijos. Todos lograron salvarse, pero tuvo que mudarse a un lugar secreto, y tanto a ella como a otros ministros, por primera vez les fueron asignados guardaespaldas, en un país donde la violencia era inusual.

Lo que suceda en la próxima década, determinará si Dinamarca sobrevive como un bastión de vida civilizada, con su elevado sentido humanístico y responsabilidad social, o si se convertirá en una nación en guerra civil contra los promotores de la Sharia.


Un ejemplo más de adonde nos está llevando la permisividad ante comportamientos que llegan desde lo más hondo de la edad media. La sharía acabará con nuestra forma de vida si no acabamos nosotros antes con ella. Es la guerra ¿la perderemos? probablemente.